5 de febrero de 2014

Más allá de la etimología

Hipócrates sosteniendo un báculo o vara.

Si el desarrollo de la ciencia ha acompañado en mayor o menor medida a la Geobiología, aquella se mantiene cautelosa, incluso desconfiada por lo que se refiere a la Radiestesia o Rabdomancia. Se considera esta una disciplina mal llamada "pseudo-científica" por la incapacidad de explicarla o comprenderla.

Recurrimos siempre a una raíz latina o griega para ponerle nombre a las cosas y así, etimológicamente la Geobiología es la materia que estudia "logos" el impacto de nuestro planeta "geos" sobre la vida "bios".
Por su parte, el término radiestesia está formado por la palabra latina "radium" o radiación y la griega "aisthesis" percepción: el arte de hacer perceptible o consciente un fenómeno natural oculto de índole energético.
En el caso de la rabdomancia, esta procede del griego "rhabdos" vara y "manteia" adivinación.

Pero más allá de la simple aportación al enriquecimiento de nuestro vocabulario, la antigua Grecia destacó por algo más.


4 de febrero de 2014

El misterioso bosque de árboles torcidos de Polonia


El extraño bosque de pinos torcidos

Desde el momento en el que la imagen cayó en mis manos no dejo de preguntarme cual sería la explicación a este misterioso fenómeno. Tras consultar diversas fuentes que hablan de su posible origen me atrevo a especular con una nueva hipótesis.

Nos encontramos en Gryfino, una remota región situada al oeste de Polonia. Este inusual bosque contiene 400 pinos con una curvatura de 90 grados en su base aportándole un aspecto femenino y agraciado que los diferencia del resto que conforman dicho bosque ya que todos los árboles están girados hacia el norte mientras que el resto del bosque que lo rodea desarrolla troncos rectos. Solo esa parte de pinos están doblados.